| Con este tango que es burlón y compadrito
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| Se ató dos alas la ambición de mi suburbio
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| Con este tango nació el tango, y como un grito
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| Salió del sórdido barrial buscando el cielo
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| Conjuro extraño de un amor hecho cadencia
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| Que abrió caminos sin más ley que la esperanza
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| Mezcla de rabia, de dolor, de fe, de ausencia
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| Llorando en la inocencia de un ritmo juguetón
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| Por tu milagro de notas agoreras
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| Nacieron, sin pensarlo, las paisas y las grelas
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| Luna de charcos, canyengue en las caderas
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| Y un ansia fiera en la manera de querer
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| Al evocarte, tango querido
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| Siento que tiemblan las baldosas de un bailongo
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| Y oigo el rezongo de mi pasado
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| Hoy, que no tengo más a mi madre
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| Siento que llega en punta 'e pie para besarme
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| Cuando tu canto nace al son de un bandoneón
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| Carancanfunfa se hizo al mar con tu bandera
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| Y en un pernó mezcló a París con Puente Alsina
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| Triste compadre del gavión y de la mina
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| Y hasta comadre del bacán y la pebeta
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| Por vos shusheta, cana, reo y mishiadura
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| Se hicieron voces al nacer con tu destino
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| ¡Misa de faldas, querosén, tajo y cuchillo
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| Que ardió en los conventillos y ardió en mi corazón |